Las ONG exigen autonomía para consejos comunales
MIGDALIS CAÑIZALEZ V.
EL UNIVERSAL
Las organizaciones no gubernamentales que han tenido experiencia en el trabajo comunitario coinciden en que no les afecta en su trabajo el auge de los consejos comunales, porque pueden reforzar su misión como entes orientadores para contribuir a la organización vecinal.
Según José Gregorio Delgado, director de la Escuela de Vecinos de Venezuela, si la meta es que el consejo comunal sea una expresión del poder popular tienen que garantizarle a la gente educación, organización, información administrativa desde el punto de vista de los recursos disponibles y el aspecto de la utilidad, "porque creemos que si la gente no siente la efectividad en la gestión no apoyaría el consejo comunal. Nosotros como institución autónoma y apolítica podemos hacer convenios con el Gobierno de capacitación y educación ciudadana para contribuir a la formación de las diferentes comunidades".
En su opinión, los consejos comunales tienen que ser autónomos en sus iniciativas organizativas. "En esta primera etapa se justifica un respaldo financiero del Gobierno, pero si se está hablando de principios como autogestión o cogestión, tienen que garantizar que se generen sus recursos propios y que no dependan solamente del aporte del Gobierno Nacional".
Comentó que esta experiencia "la vamos a seguir respaldando; estamos en la capacidad de dar talleres, foros y charlas sobre la organización de estos órganos comunitarios". Se mostró de acuerdo con el Presidente en cuanto a que hay que reformar la Ley de los Consejos Comunales, "pero tienen que ser unos cambios consultados, porque el temor que uno tiene es que al entrar la ley en la Habilitante efectivamente no se consulten las experiencias de la gente que ha utilizado la legislación".
Por su parte, Jesús Torrealba, miembro de la Asociación Civil Radar de los Barrios, afirmó que "a nosotros como organización comunitaria no nos afecta en los más mínimo el auge de los consejos comunales, pero lo que creemos es que hay que modificar el enfoque político e ideologizado del manejo de este tema, porque para el Gobierno ha sido un tema político y propagandístico".
Considera que los consejos comunales son una forma de organización de la gente similar a lo que eran en los años 60 las juntas pro mejoras y en los años 70 y 80 las asociaciones de vecinos. "Todas esas formas de organización son importantes en tanto y en cuanto sean de verdad expresión del poder popular, pero cuando han intentado ser mediatizadas, bien sea desde el poder del Estado o de los partidos políticos, esas formas se secan porque ya no expresan el poder del pueblo sino de intereses de los burócratas".
Aseguró, "nuestro trabajo como Radar de los Barrios será darle a los dirigentes comunitarios más y mejores herramientas para que se conduzcan de manera autónoma frente al Estado y a las organizaciones políticas. Nosotros no nos vemos ni afectados ni sustituidos por los consejos comunales. Por el contrario, son un nuevo reto para asesorarlos debidamente".
EL UNIVERSAL
Las organizaciones no gubernamentales que han tenido experiencia en el trabajo comunitario coinciden en que no les afecta en su trabajo el auge de los consejos comunales, porque pueden reforzar su misión como entes orientadores para contribuir a la organización vecinal.
Según José Gregorio Delgado, director de la Escuela de Vecinos de Venezuela, si la meta es que el consejo comunal sea una expresión del poder popular tienen que garantizarle a la gente educación, organización, información administrativa desde el punto de vista de los recursos disponibles y el aspecto de la utilidad, "porque creemos que si la gente no siente la efectividad en la gestión no apoyaría el consejo comunal. Nosotros como institución autónoma y apolítica podemos hacer convenios con el Gobierno de capacitación y educación ciudadana para contribuir a la formación de las diferentes comunidades".
En su opinión, los consejos comunales tienen que ser autónomos en sus iniciativas organizativas. "En esta primera etapa se justifica un respaldo financiero del Gobierno, pero si se está hablando de principios como autogestión o cogestión, tienen que garantizar que se generen sus recursos propios y que no dependan solamente del aporte del Gobierno Nacional".
Comentó que esta experiencia "la vamos a seguir respaldando; estamos en la capacidad de dar talleres, foros y charlas sobre la organización de estos órganos comunitarios". Se mostró de acuerdo con el Presidente en cuanto a que hay que reformar la Ley de los Consejos Comunales, "pero tienen que ser unos cambios consultados, porque el temor que uno tiene es que al entrar la ley en la Habilitante efectivamente no se consulten las experiencias de la gente que ha utilizado la legislación".
Por su parte, Jesús Torrealba, miembro de la Asociación Civil Radar de los Barrios, afirmó que "a nosotros como organización comunitaria no nos afecta en los más mínimo el auge de los consejos comunales, pero lo que creemos es que hay que modificar el enfoque político e ideologizado del manejo de este tema, porque para el Gobierno ha sido un tema político y propagandístico".
Considera que los consejos comunales son una forma de organización de la gente similar a lo que eran en los años 60 las juntas pro mejoras y en los años 70 y 80 las asociaciones de vecinos. "Todas esas formas de organización son importantes en tanto y en cuanto sean de verdad expresión del poder popular, pero cuando han intentado ser mediatizadas, bien sea desde el poder del Estado o de los partidos políticos, esas formas se secan porque ya no expresan el poder del pueblo sino de intereses de los burócratas".
Aseguró, "nuestro trabajo como Radar de los Barrios será darle a los dirigentes comunitarios más y mejores herramientas para que se conduzcan de manera autónoma frente al Estado y a las organizaciones políticas. Nosotros no nos vemos ni afectados ni sustituidos por los consejos comunales. Por el contrario, son un nuevo reto para asesorarlos debidamente".
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magaly -