Cuatro líderes comunitarios cuentan sus experiencias
Las comunidades caraqueñas tienen héroes anónimos que dedican años de su vida a mejorar su entorno. Nadie les paga y a veces sus vecinos ni siquiera les agradecen, pero ellos siguen adelante con el propósito de hacer más amigables sus barrios y urbanizaciones.
A los líderes comunitarios los llaman por su nombre en las alcaldías, de tanto verlos allí insistiendo, reclamando y exigiendo atención; y en las parroquias, todos los conocen y acuden a ellos. Aquí cuatro ejemplos de la fuerza de estos caraqueños.
Sandra Carrillo, presidenta de la Asociación de Vecinos de Chuao
"Yo empecé en la asociación de vecinos a través de mi mamá, que era la secretaria. En éstos grupos siempre hay mucho por hacer, suelen ser el enlace con las autoridades, detalles que los vecinos no saben cómo resolver solos. Me fui involucrando en el trabajo de voluntariado y aprendí mucho de gente valiosa que ha pasado por la Asociación.
Soy diseñadora gráfica y fotógrafa, pero esto me consume mucho tiempo, menos mal que trabajo por mi cuenta. No me arrepiento, es un trabajo muy gratificante, pues conoces a mucha gente que está haciendo lo mismo que tú en otras parroquias y no te sientes solo. Logras solucionar problemas que benefician a miles de personas y hasta les cambian la vida, te sientes el catalizador de muchas cosas.
Creo que mi aporte más importante ha sido mejorar las cadenas de comunicación entre vecinos. Además de los canales regulares como carteleras y volantes, ahora implementamos los blogs, páginas web, los correos electrónicos y redes sociales, que también son gratuitas.
Fue muy importante que la comunidad estuviera unida para detener la construcción de un parque verde en La Carlota y la lucha porque allí se cree un parque, sigue. Lo más importante es cambiar su zonificación, para que ya no sea área militar. Esa lucha fue motivadora de grandes alianzas de muchas zonas de la ciudad, vino gente de Catia a Petare y mantenemos los contactos.
Aquí logramos algo muy importante y fue que consejo comunal y asociación de vecinos trabajáramos en conjunto".
Aníbal Isturdes, presidente del Comité de Defensa de San José
"He dedicado mi vida al amor y la pasión por la comunidad. Recuedo la lucha cívica de San José. El Gobierno quería quitar la parroquia y nosotros nos enfrentamos a esa amenaza, eso fue en el año 76. Nosotros nos reuníamos en la iglesia de San José día y noche, pero valió la pena, porque logramos identificarnos como vecinos, como josefinos. La comunidad entendió el valor de su historia y memoria.
Es notable también el logro de salvar el mercado de las flores, lo querían tumbar por el BusCaracas. Nos decían que era imposible pelear por eso, que contra el Gobierno íbamos a perder y no fue así. Luego está el árbol Samán de La Trinidad, Bolívar lo visitaba y ese árbol sigue vivo. Logramos un decreto de que se decretara patrimonio ambiental.
Ahora nos preocupa la inseguridad. Estamos exigiendo que se hagan espacios verdes y centros recreativos y eso en el fondo le daría respuesta a la violencia. Hay un espacio en frente del liceo Santos Michelena en donde se podría hacer un centro deportivo que se llame Alfonso Chico Carrrasquel, un hombre humilde que amó la parroquia.
Otra cosa que hemos pedido y lo seguiremos haciendo es el reordenamiento urbano. El Bicentenario del 5 de julio pasó y aquí no llegaron los arreglos, estamos abandonados. Las comunidades tradicionales de Caracas reclamamos atención".
Alma Clara Mederico, contralora social del consejo comunal de Colinas de Vista Alegre
"Trabajo en una escuela pública de La Vega. Ahí he visto de cerca la necesidad de esos niños y sus familias, por eso me gusta el voluntariado. Con el trabajo por la comunidad puedes obligar el ente responsable a cumplir sus obligaciones de mantenimiento y seguridad, conseguir los derechos que tienes como ciudadano.
Antes era de la asociación de vecinos, pero nos convertimos en consejo comunal, ya tengo cuatro años allí, pero 11 en total trabajando por Colinas de Vista Alegre. Nuestro mayor logro es habernos organizado. Así logramos que el gobierno de Distrito Capital nos arreglara la calle 1 que se estaba cayendo.
El alcalde Jorge Rodríguez nos dijo oligarcas y luego nos tuvo que responder. Hicimos muchas protestas para que nos atendiera, nosotros pagamos impuestos y es nuestro derecho tener calles transitables.
Todo el esfuerzo ha valido la pena porque hemos logrado mejoras. Les digo a mis vecinos que sean más participativos, que se preocupen más. Al final la mayor calidad de vida será para todos. Es desgastante, es verdad, al final creo que lo hago, y lo seguiré haciendo por vocación".
Félix Velásquez, líder comunitario del barrio El Progreso de Petare
"Yo jugaba béisbol y creo en el deporte para que los niños puedan copiar buenos modelos, alejarse del ocio y la violencia en los barrios. Con un grupo de voluntarios ayudé a rescatar el centro deportivo y cultural José Félix Ribas, en el sector Las Vegas, en Petare. Ahí hemos hecho presentaciones con grandes equipos y les dimos un lugar a muchos grupos deportivos y culturales para que dieran sus clase sy practicaran allí.
El trabajo por la comunidad me inspiró a estudiar trabajo social en la UCV, proque contrataba mi realidad con lo académico y ahora lo sigo haciendo, trabajando en políticas públicas y planes sociales.
Logré una participación destacada en el programa Liderazgo y Visión del Iesa con un programa de aprovechamiento de desechos sólidos y reciclaje en la comunidad.
La mayor gratificación ha sido ver alos jóvenes de sectores populares creyendo que sí pueden superarse, eso me motiva".
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MIROSLAVA BUCCÉ C. -